Una de las habilidades que todas las empresas o negocios deberían de tener es la facilidad de manejar el tiempo a favor de ellos. Y es que saber organizarse, y como mejorar nuestra planificación del tiempo a nuestro favor, puede traer múltiples beneficios a tu equipo de trabajo.
Para poder planificar el tiempo de manera eficaz, tienes que trabajar desde las actitudes de tu equipo, los hábitos y comportamientos personales de cada uno de los miembros.
🕐 Planificación del Tiempo tuyo y de tu equipo
Entonces, el primer punto que debes hacer es cambiar tu mismo, focalizando en el tiempo.
¿Cómo?
Trabajando en tus propios hábitos de administración, analizando en qué tienes que mejorar para poder obtener más tiempo y planificar las actividades correspondientes del día.
Cuando tienes esta habilidad conseguida, entras con mejorar a tu equipo. Ayudas a que estos también consigan administrarse de la misma manera que tú, pero puede ser que, de diferentes formas, puesto que la estrategia de planeación es personal, es como a cada quién le funcione. Recordando que al final es un trabajo en conjunto que tiene que salir a ciertos tiempos.
Los medios y la forma en que se hará la optimización tiene mucho que ver en la comodidad que el empleado o colaborador a un método de trabajo que se haga, para esto existen diversas aplicaciones para resolver el trabajo de forma continua.
Lo que siempre debemos de tener en cuenta al momento de gestionar nuestros horarios es: Determinar qué es lo más urgente en ese momento y luego determinar lo más importante.
🚨 Diferencias entre lo urgente e importante.
- Cuando hablamos de lo más urgente nos referimos a lo que no puedes dejar para más tarde o que se tiene que hacer en un momento específico, es algo que requiere una solución inmediata por la razón que sea.
- Y se habla de lo importante cuando tienes que hacer las tareas que tú y tu equipo de trabajo han determinado para mantener el orden diario, que pueden llegar hacer postergadas en caso de que surja algo con urgencia.
- Siempre tenemos que tomar en cuenta los imprevistos. Es todo aquello que puede ocurrir y que altera el orden de los factores o actividad que tenías en el plan del día.
Es por eso que, en el momento de hacer tu lista de tareas, tienes que dar espacios, al menos uno o dos por si llega entrar algún pendiente urgente que se necesita ejecutar en ese momento.
Recuerda que es importante saber delegar y decir que “no” de vez en cuando no está mal. Tienes que enfocarte en cuáles son las prioridades del día y usar herramientas que el mismo internet o una agenda te pueden dar.
Las tareas siempre requerirán tiempo, pero es aquí donde tú tienes que darles los momentos que necesiten sin tantas interrupciones, para que lo importante no se vuelva en lo urgente, consiguiendo una buena planificación del tiempo.